
El corazón del movimiento Slow Food es la creencia que los alimentos son mejores si los compramos con locales, los preparamos con cuidado y los consumimos con aprecio.
Este movimiento nació en Italia en 1989 como una organización sin fines de lucro y comenzó como una respuesta al auge de la comida rápida y un mundo en el que podemos comer rápido y barato sin tener que dejar el coche.
Sin embargo, rápidamente se convirtió en un movimiento social y político en todo el mundo que abarcaba mucho más. Slow Food se trata de proteger los alimentos locales, así como las culturas y tradiciones alimentarias. También se trata de proteger la biodiversidad por su estacionalidad y variedad de sabores. Se trata de fomentar las relaciones entre agricultores, restaurantes y compradores.
Y se trata de crear y compartir significado en nuestro consumo de alimentos. En general, el movimiento tiene como objetivo darnos una razón no solo para seguir interesados en lo que comemos, sino también de dónde viene a dónde va nuestra elección cuando consumimos y cómo se produce.
Tu salud es la primera que verá beneficios casi de inmediato, la comida rápida a menudo se come rápido y lo que sea por lo que tus niveles de azúcar, presión arterial, sistema digestivo y por ende tu salud emocional y mental que están íntimamente ligadas están siempre en jaque.
Ser consciente de lo que comes cambiará tu vida por completo. Es algo que no podemos evitar o eliminar de nuestra vida, nuestros alimentos son nuestra materia prima, de ahi parte todo.
Tu bienestar y por ende todo tu futuro, lo que quieres vivir, el tener éxito en tu vida financiera o estar en tranquilidad con tus recursos de dinero, estar presente en la vida de los que amas etc.
Si es algo que tomará gran parte de tu tiempo de vida, el alimentarte y todo lo que conlleva, ir a comprar, preparar, cocinar, guardar, limpiar no es lógico que sea la actividad que más aprecies de tu vida y de tu familia o de los que amas?
Comer de forma más consciente y apreciativa, nos permite saborear más. La comida rápida está pensada para ser consumida rápidamente, por eso tiene sabores concentrados. Sin embargo, el sabor no dura mucho y finalmente es insatisfactorio. La comida consciente y nutritiva, por otro lado, está hecha con los mejores ingredientes y productos que están llenos de sabores naturales. Cuando comemos despacio en un ambiente relajado, experimentamos más sabores, texturas y aromas, y obtenemos una nueva apreciación de nuestra comida.
Y hablemos de tus finanzas cuando tomas esta decisión, cambiará drásticamente.
Haz la prueba un mes de anotar todo, absolutamente todo lo que gastas en comida rápida de último minuto o diario.
Con esos recursos podrás alimentarte 100% mejor y al mismo tiempo ahorrar una cantidad muy significativa de dinero para que lo uses en cosas que aprecias.
Este cambio es lento y lleva su proceso, pero el punto es comenzar a pensar en ello.
Te compartiré en el Reset 2023 y en este contenido formas sencillas de adaptar este estilo de alimentación junto con alimentos enteros basados en plantas para poder hacerlo lo más sencillo posible, nutritivo, balanceado y lo más importante, ajustarlo a la vida real donde tenemos que hacer más con el menor tiempo.
Mucho amor y nos leemos en el siguiente episodio.
Annya